miércoles, 20 de diciembre de 2006

Vida en total penumbra...


Fuente imagen : http://radiocristiandad.files.wordpress.com/2006/10/fortea-penumbra.jpg

Me pregunto ¿cómo debe ser la vida del ser humano que jamás ha visto una verdadera luz en su vida? No sólo eso ¿cómo debe ser la vida en una total oscuridad? desde el inicio hasta el final, sin una brizna de luz...

Yo no quiero hacer una comparación de ciegos, que a pesar de todo pueden interactuar y recibir información del mundo que les rodea. Me imagino una desconexión total de la "luz", como si la luz ni siquiera fuera un ideal. En un mundo que la luz de nuestras vidas no exista. Que la vida sea sólo la parte trágica, pero a su vez interesante y divertida, de las tragedias griegas presocráticas. Que la felicidad ni siquera sea un mito, sino que jamás fue concebida y jamás existió ni existirá...Trataré de tomar una senda que me lleve al imaginativo de un mundo sin luz:

He llegado a la conclusión de que amo y odio con toda mi fuerza la luz. Como ser racional que soy, adoro y amo todas las bondades que la luz trae; sin embargo al saber que existe la luz y al ver que sus bondades para mi son inalcanzables, negadas y no destinadas para mi, repudio ese estadio de vida "superior", el cual trae como consecuencia la demencia, el deseo de destrucción, de que el mundo sufra contigo. Si tu vida está en la oscuridad deseas y a la vez no deseas que todo el mundo sea así, en un plano de egoísmo arístocrático extremo ya que uno se siente al ser desdichado se siente "afortunado y único"(ver "Ser Aristocrático" en Más allá del bien y el mal de Nietzsche).

Sin embargo, en un mundo en el cual no existe la luz, el motivo del dolor y la demencia por la ausencia de esta no exisitiría. Sólo existiría la nada ¿cuál sería la motivación entonces para continuar la vida? Si bien; el dolor, el sufrimiento y caer en la vorágime de la estupidez por aferrarte a la esperanza de la luz; no existirían, estos también definen de manera real la existencia de cada uno. Sin estas frustraciones en una total oscuridad ¿qué es lo que quedaría?

Es dificil imaginar un mundo sin luz; y si tal vez ser frío como un insecto, impermeable al dolor, a la frustración, a la estupidez, es un estadio deseable para mi. Ese "dolor" del momento hace que viva esas frustraciones de manera intensa...tal vez con dolor, pero son testimonio de que la vida es real y te empuja a buscar un estadio en el cual tu debilidad no merme más tu racionalidad. Es la ausencia y existencia de la luz el cual me motiva a evolucionar, a crecer a hacerme más fuerte...a ser frío como un insecto en mi mundo en el cual la luz está negada, sin embargo existe fuera de mi propia existencia.

Demostrar que puedo soportar una existencia sin luz. Ser más allá de un humano común que no tolera una vida sin luz, que una vida de "soledad rodeada de multitud" o "condenada a la penumbra". Para mi Zaratustra (en Así habló Zaratustra, valga la redundancia), no quería "mostrar la luz" al inconciente colectivo, quería que los humanos trascendieran ese estado de marasmo por falta de luz y llegar a ese estado de que uno no es camello (no es esclavo de sus obligaciones) ni león (ni de sus deseos). Despúes de todo, como dice Jhonen Vasquez, "Todos somos esclavos de algo", trascender a nuestra esclavitud (y ser niños en una vida más elevada sin ataduras) a la luz nos hace realmente libres...una vida en total penunbra en la que existe la luz, pero que aprendemos a vivir sin ella nos hará trascender lo común de la plebe del preludio en el "ocaso de Zaratustra".

Tal vez es algo inconcebible en mi limitado intelecto crear un mundo de penumbra pura, en el que la luz no es ni siquiera una esperanza; sin embargo puedo maquinar lo más cercano a la penumbra en mi propia existencia.

Magill Umbra

jueves, 14 de diciembre de 2006

La vida ha cambiado

Fuente de imagen: http://www.edicionesdelsur.com/images/meaulnes.jpg

The world has changed, every new day I look around myself and I barely recognize the sky, the wind, the air...Every day has a new enviroment and is unique in it's own way and it cannot be repeated. Every day the world around me changes...The world has changed

La vida ha cambiado, miramos siempre al pasado y comparamos nuestra existencia actual con el pasado y con certeza puedo afirmar que nuestra vida ha cambiado. Puede ser a nivel de detalle o a nivel radical, pero nuestra vida nunca es monótona. Desde con que personas interactuabamos el año pasado en relación a este año, hasta las horas programadas para diferentes actividades en el día, todo cambia, todo es volátil. No nos damos cuenta, pero nuestra vida ha cambiado.

¿A que quiero llegar con esto? A nuestra aferración al pasado en relación a nuestro futuro. No importa cuantas veces añoremos algún hecho o momento pasado, este no volverá. Recuerdo con este pensamiento al protagonista del libro "El Gran Meaulnes" de Alain Fournier:

Meaulnes se aferró tanto al momento feliz del pasado, se enamora de una joven de inefable belleza en una fiesta en la cual entró como fisgón, el cual cambia su existencia para siempre. Sin darse cuenta el vivía el pasado sin ver hacia adelante. Cuando se reencuentra con su amada de manera implícita nos damos cuenta que el pasado no puede regresar, el pasado fue como se dió. Podemos recordarlo con riqueza de detalles, pero no volverá y si regresa no lo hace como lo recordamos, no lo hace igual.

El pasado muere en nuestro recuerdo, en nuestra memoria. El regreso del pasado nos trae recuerdos que tenemos guardados, atesorados o enterrados sobre algún momento del pasado, pero aún así entramos en la negación del pasado como un tiempo que ya ocurrió y no volverá a ocurrir en nuestras vidas de la misma manera. Meaulnes, vivió aferrado a su pasado y una deuda con Franz; uno de los personajes de la novela al cual Franz debe su "recuerdo feliz" y a una promesa de buscar juntos esa felicidad; deaquellas que sólo se pueden pagar con el honor y la propia sangre...a veces miramos mucho hacia el pasado sin darnos cuenta que en el presente la felicidad nos está mirando hacia el rostro, en este caso su reencuentro triste, pero a la vez esperanzador, con su amada. Estamos mirando tanto hacia un tiempo que ya ocurrió que sin darnos cuenta estamos caminando hacia adelante con nuestra mirada fija hacia el camino ya avanzado.

Personalmente creo que Meaulnes desperdició la oportunidad de ser realmente feliz al lado de su amada por aún vivir una esperanza del pasado que jamás volvió no obstante encontró al final de la novela al fin un camino hacia el futuro cuando su amada muere, pero descubre que aún tiene "aventuras por vivir" al lado de su hija que llega a conocer luego de un largo viaje en búsqueda de resarcir su recuerdo del pasado. Al final de la novela Meaulnes parte con su hija en brazo y se pierde en el horizonte.

Para los que no han leído esta obra maestra, se los recomiendo y les aseguro que es un libro que no se parece en ninguno a los que han leído alguna vez.

¿Por qué tienen que pasar ese tipo de tragedias para darnos cuenta que pudimos ser felices? ¿Por qué el pasado tiene ese poder tan hipnótico de hacernos caer en esperanzas vanas de momentos felices que no volverán? No quiero que me malentiendan, disfruto recordar de los momentos del pasado tanto como cualquiera, pero el pasado nunca regresará, aunque mucho lo queramos y lo deseemos. Somos tan ciegos que el pasado nos nubla la vista y perdemos la oportunidad de ver la luz al frente de nuestro sendero. La luz si existe en la vida, pero esa luz es un momento feliz hacia adelante, que como anteriormente había explicado tiene una duración finita, pero va hacia adelante. No podemos retroceder para poder encontrar esa luz del pasado, ya que en ese momento la luz ya habrá desaparecido tanto cuando damos un paso hacia atrás como hacia adelante. La felicidad es un momento el cual debemos alcanzar y vivir a plenitud mientras dura. Es la luz que aparece y nosotros corremos tras de ella hasta alcanzarla; no obstante a veces somos como Meaulnes y vivimos aferrados a la esperanza del pasado sin darnos cuenta que no avanzamos hacia el momento de iluminación que nos espera más adelante y vivimos más en penumbra con la esperanza en nuestra cabeza de la luz pasada como luciérnaga que vuela alrededor de una ciénaga desolada y sombría.

No creo que a Fournier le hubiera gustado que use a Meaulnes como ejemplo de filosofía sobre la luz y oscuridad por lo que me detendré ahí y espero que mis palabras no sean vacías para mi propia existencia. El pasado no volverá, estará vivo en nuestros recuerdos, pero siempre hay una esperanza de recuerdos nuevos tan o más felices que los anteriores si es que estamos dispuestos a caminar hacia adelante.

Magill Luminis

miércoles, 13 de diciembre de 2006

Dejar de ser humano

La combinación de los sentimientos y nuestra racionalidad es lo que nos da esa capacidad de ser ese homo sapiens que define la ciencia antropológica. A diferencia de la gran mayoría de animales, somos capaces de amar, llorar, reir, vivir con ansiedad; y a su vez, maquinar, pensar, inferir, usar la lógica y llegar a conclusiones cuasi clarividentes que tienen mucho sentido. Si bien, está comprobado que los monos y otros animales como los perros tienen esos sentimientos y pueden manifestarlos de diversas formas carecen de la fortaleza lógica y racional del homo sapiens.

No obstante, hay sentimientos que nos hacen débiles y vulnerables frente a los retos de la vida; como lo son el dolor, la tristeza, ese sentimiento de vacío en la soledad, ese sentimiento inexplicable que uno experimenta cuando al razonar vemos que nuestra vida carece de rumbo y sentido. Nietzsche era un gran advocado a la idea del Übermensch, que habría trascendido las barreras que imponen los sentimientos y habría elevado al ser humano a un paso más allá de la evolución...

Hasta ahora siento que los sentimientos me han hecho débil y vulnerable, la fortaleza y el poder no vienen de la fortaleza física sino en la capacidad de hacer, de coercionar, de manipular, de lo que significa la palabra poder; hacer que suceda lo que uno quiere sin ninguna o casi ninguna barrera que lo impida. Mi gran sueño está en alcanzar la omnipotencia y la omnisciencia real, un sueño tal vez vano, pero como humano sólo puedo soñar en alcanzar...ser algo más que un humano hace que este tipo de metas entren en la zona de lo posible, de lo alcanzable en ciertos grados y niveles.

Dejar de ser un ser humano para lograr un mayor nivel de trascendencia y existencia va más allá de liberarse de nuestra capacidad de pensar o nuestra capacidad de experimentar y sentir. Dejar de pensar nos relega al nivel de los animales, totalmente salvajes, instintivos y con ninguna capacidad de conocer o de hacer. No obstante liberarte de tus sentimientos, nos convierte en seres totalmente diferentes: fríos, maquinadores, calculadores, realmente racionales, enfocados...

Se dice que en los rituales profanos para ser un avatar del mismo demonio uno debe ser capaz de sesgar la vida de su propia sangre para probar que ya no es un ser humano y poder servir a lo que nuestra sociedad considera la maldad y némesis absoluto. Los asesinos reprimen sus sentimientos de manera total y dejan de ser humanos para poder enfocarse en el trabajo de sesgar vidas sin que los sentimientos intervengan de manera negativa, incluso usan sentimientos falsos como máscaras y caretas que faciliten el acto de asesinar de manera presencial, salir de las sombras y poder observar a los ojos a la víctima antes de poder actuar como el sesgador con el trigo y acabar con la existencia y el propósito de la persona.

Reprimir y eliminar los sentimientos de una persona ¿realmente el dolor es tan insoportable para mi que me haga considerar opciones tan psicóticas e incomprendidas por la sociedad? Realmente la vesania y la demencia me acosan en mis pesadillas: "...deja de ser humano y conviertete en lo que deberías ser, abraza tu propia oscuridad y abandona tu vida sin sentido. Dale un cariz oscuro, pero lleno de propósito a tu existencia. No volverás a sentir dolor, no volverás a estar limitado por la estupidez de terceros, no volverás a llorar por lo que nunca debió ser, toma la vida con tu propia mano y conviertete en el instrumento de la muerte, se el sesgador de lo que no merece vivir. La vida y la libertad son privilegios y no derechos, hay vidas tan carentes de sentido que no merecen ser vidas, tu puedes ver y trascender la vida de los comunes mortales ser juez y omnipotente a tu manera..."

Mi oscuridad siempre latente me ha estado tentando a dejar la vida que llevo, soy realmente una persona perturbada e incomprendida, pocos saben en verdad los niveles de pensamientos extremos y caóticos que llevo conmigo. Siempre he pensado que la vida no puede ser tan simple ni tan predecible, la vida real no es una vida llena de emoción o de vivir el momento eso es vivir el día a día y dejarte vivir como velero a la deriva movilizado por el criterio del viento. Una vida con propósito es una vida real, donde los valores como el honor, tener palabra, convicción y compromiso crean una existencia con sentido que contribuye a la creación de un propósito mayor y duradero para las existencias futuras. Que nuestra vida sea trascendente es prueba de que dimos pasos y dejamos huellas en este mundo, ni siquiera los más grandes de nosotros podemos competir con el tiempo. A excepción de unas pocas honrosas excepciones la mayoría de nosotros en un par de generaciones habrá sido olvidado y ¿para qué? ¿quién será testigo de que nuestra existencia fue alguna vez real?

Realmente el dolor y la tristeza nos limitan tanto que nos lleva a un pseudo marasmo de inacción. Yo estoy en una fase de tentación por la oscuridad de mi corazón, pensamientos que pensé ya tenía olvidados siguen presentes en mi, como una sabia frase dice: "Puedes tal vez no recordar, pero nunca olvidarás." Dichosos son los que pueden realmente olvidar sus errores, yo no puedo hacer eso, recuerdo con dolor y riqueza de detalles cada falla, cada error, cada caída y estupidez en mi vida que me hacen recordar que soy humano, imperfecto, que mi vida está cada vez más perdida en la oscuridad por día que pasa y sin rumbo aparente. Las lágrimas corren por mis mejillas al escribir estas palabras; símbolo de que soy aún un ser humano. Dejar los sentimientos de lado es dejar de lado también la alegría y el amor, cosas que a pesar de haberlas experimentado brevemente hacen que la vida valga la pena; no obstante el dolor es insoportable. Yo ya pensé que estaba acostumbrado al dolor y a la soledad, pero mi corazón en pedazos y otra lágrima furtiva me recuerdan que no es así, mi corazón ya estuvo partido en pedazos antes; pero ahora lo está más que nunca, siento que esta vez no sólo me lanzo al abandono por el sentimiento de dolor, sino también a la pérdida de la esperanza.

Luego de tantos parrafos sin sentido sobre la pérdida de humanidad sigo preguntandome ¿por qué somos seres tan duales? ¿por qué debemos estar afectados por 2 caras de una misma moneda? ¿podemos elegir una vida sin emoción para lograr una vida de propósito y sin embargo sin tener emoción como la gozaríamos?

La oscuridad me ha dado una opción más no una respuesta real y el dolor hace que considere tal nivel y grado de demencia y pérdida.

Magill Umbra

domingo, 3 de diciembre de 2006

El nacimiento y la muerte de la luz

Juzgo novedoso hablar un poco sobre la luz de la vida. Esta luz tiene un origen y un final como cualquier evento finito en la existencia universal.

El nacimiento de una estrella en el espacio, es un evento único, sin precedentes y hermoso en su rareza. Es sólo algo que los científicos pueden inferir, conceptualizar y soñar con sus teorías de acumulaciones de nubes moleculares y supernovas. No obstante, todos convergen de que es un hecho aisalado y bello como ninguno. Las estrellas nacen en el universo de una manera espontánea y dificil de predecir. Es un hecho tan bello, que este fenómeno crea sistemas, satélites y objetos celestes alrededor de este acontecimiento. El nacimiento de una estrella no sólo crea luz, crea "vida" y presencia dentro del vacío del espacio.

Del mismo modo, la luz de nuestras vidas aparece en nuestra existencia y además arrastra muchos elementos que disipan el vacío de la vida sin sentido, como lo son la esperanza, el amor, el deseo de superación, la ansiedad sana hacia un futuro mejor, entre muchos otros. El nacimiento de la luz trae elementos ajenos a la "no existencia" de la oscuridad, así como el nacimiento de una estrella trae presencia y elementos al vacío del espacio. Es la antítesis de la vida vacía la cual expuse con anterioridad y la cual con sus "nuevos elementos" dentro de nuestra vida nos hace tener una senda hacia "adelante" y nos revela las formas reales a nuestro alrededor. Esa luz es tan bella, tan esperanzadora, que no nos dignamos a mirar atrás, a la oscuridad anterior a la existencia de esta luz y negamos que tal momento alguna vez existió. Ese es el gran poder de la luz.

Sin embargo, el momento triste en el espacio es el fin de la luz, el nacimiento de la estrella enana, la estrella negra...LA MUERTE DE LA ESTRELLA. Si la estrella crea presencia y elementos en el espacio, su muerte está conectada en una cascada a la destrucción de todos sus elementos relacionados. Los científicos teorizan que cuando muera el sol de nuestro sistema, el proceso degenerativo de esta desencadenará los eventos de destrucción a través de una onda de choque por un supernova degenerativo que arrasará con nuestro sistema solar y al terminar la destrucción y el caos, el vacío prevalecerá en un vacío dentro del mismo vacío espacial, un agujero negro.

La luz en nuestras vidas tiene el mismo comportamiento, cuando esta luz nos abandona deja tal vacío y tal destrucción a su salida que a veces muchos de nosostros no nos podemos recuperar. La muerte de nuestra luz oblitera toda nuestra existencia y nos lleva a los niveles más oscuros de la depresíón...perdemos la esperanza, la felicidad, el deseo de vivir, el sentido de vivir. Es tan insoportable que incluso el vacío dentro del vacío de no existir es demasiado atractivo, los más extremistas sesgan su existencia bajo su propia mano, pero esa no es la solución más conveniente. Yo no soy ningún juez para determinar cual debe ser el campo de acción para todos en tal situación, cada uno debe buscar su propia respuesta. Lo importante es que debemos estar preparados para cada nacimiento y muerte de la luz, este hecho es finito e incontrolable, pero sabemos que efectos causan en nuestras vidas y debemos estar preparados para su llegada y para su partida. La gran interrogante ¿vale la pena la existencia de la luz? Preferiría vivir una vida con una sola estrella fugaz que una vida de completa oscuridad.

Tengo la esperanza de una luz venidera y duradera, algún día...Pero la oscuridad no debe ser repudiada, es parte de nuestro existir y parte importante de nuestro peregrinaje. La persona que ha vivido toda su vida iluminado cae de una manera más profunda que el resto cuando es luz se termina. Mientras que la persona acostumbrada a la penunbra toma cada destello como la esperanza que lo elevará y traerá la verdadera luz...Ningún extremo es bueno, debemos estar preparados.

Tal es el poder de la luz, tengo la esperanza de una verdadera luz.
Magill Luminis

sábado, 2 de diciembre de 2006

La luz y la teoría de la lámpara

Muchos de nosotros buscamos la felicidad y la dicha en este mundo caótico y desquiciante. A veces, entre tanta muerte, caos, destrucción, demencia, soledad y apartamiento creemos que hay una luz que ilumina todos esos vacíos de oscuridad que hacen que nuestra vida tenga sentido. Pero, exactamente que es ese sentido que le queremos dar a nuestra existencia, y porque necesitamos esa "luz" que nos de una guía para poder vivir y darle meta a nuestro andar cotidiano.

Lo que no comprendemos, lo que nos deprime, lo inexplicable, burdo y ruin le dan oscuridad a nuestra vida por lo que necesitamos esa "luz" que aleje y sea la almanera de la esperanza entre las sombras que trae la oscuridad a nuestro existir. No obstante, los que hemos vivido en una situación de oscuridad constante, al borde de la vesania e insanidad, sabemos que la luz es sólo algo temporal. La oscuridad es la ausencia de luz en todo sentido, la nada en su más pura expresión. A mayor cantidad de estos elementos sombríos que se posan en el árbol de nuestra existencia, nuestra vida se llena de sombras, nuestra existencia se convierte en una imitación pobre de vida y cada vez se acerca más a la pureza de la oscuridad, de la no existencia, del vacío. Una vida vacía, es una no vida, es una vida de oscuridad. Una vida "pura e ímpia" a la vez, ya que nadie realmente desea ese tipo de vida.

Nuestra esperanza y respuesta a situación que irremediablemente nos puede llevar a la locura y existencia sin sentido es una luz que nos guíe, que nos de sonrisa en el momento de pena, que nos de esperanza en el momento de máxima depresión y dejadez, que nos haga sentir que todo ese sufrimiento que acarrean las sombras de la vida lo valen ya que tienes una luz que te defiende, te purifica, te permite crecer y evolucionar.

Pero, ese elemento que llamamos luz en nuestras vidas, no es una luz duradera. No sabemos cuanto durará este tipo de esperanza. Así como las mismas estrellas mueren en la oscuridad del espacio y sólo queda al final la nada en la fría soledad espacial, lo mismo sucede con la luz de nuestras vidas. Estas pueden durar toda una vida, así como una vacía estrella fugaz en nuestro camino, sin embargo no son eternas y no son controladas por nuestra voluntad. La voluntad de un tercero es el determinante de la existencia de esa luz. Es relativo quien define la existencia de esta luz, si no lo que importa es quien define su duración.

Imaginemos que estamos en un lugar abierto totalmente oscuro, es tan oscuro que la penunbra pareciera tener densidad propia. Es tan sofocante que se siente que fuera un lugar cerrado. Soreprendentemente a este lugar, llega un tercero con una lámpara encendida y la coloca en un lugar visible al frente de ti; por lo que las sombras son expulsadas del lugar cerrado y se inmaterializan como sin jamás hubiera existido. Al fin tienes la oportunidad de ver en donde estabas encerrado en el fondo de un hoyo profundo cavado por ti mismo; puedes divisar un sendero trazado hacia abajo por tu torpeza al movilizarte en la oscuridad; pero lo más importante: Ves un camino que sigue hacia adelante y te permite salir de este agujero.

No obstante, pasa lo inexplicable luego de algún tiempo al margen de la situación: la lámpara se apaga y ya no existe. La oscuridad ha vuelto y todas las esperanzas, ahora vanas, que tenías de volver a caminar, de darle sentido a tu andar ahora se han ido. Tratas de explicarte que pasó ¿falló la lámpara?¿esa tercera persona la apagó? ¿por qué tenía que desaparecer? Lo más desquiciante de todo es que no encuentras una lógica racional a todas a estas interrogantes que asaltan a tu mente. Tienes miedo, estás en el mismo hoyo de nuevo y no sabes que hacer. Lloras de la impotencia, porque la esperanza se ha ido y no puedes volver a andar.

Ese es el poder de la oscuridad, tu vida se vuelve marasmo, no le tienes miedo a la muerte pero la deseas, ya que tu vida vacía es lo mismo que una no vida ¿qué es lo que uno puede hacer ante esta situación? Tener la esperanza de que la luz volverá, morir in situ o aprender a tolerar la oscuridad como algo constante en nuestra vida y la luz como algo pasajero. Aceptemos la oscuridad de nuestras vidas y aprender a vivir en la oscuridad es una ardua tarea, pero es la opción más vialbe luego del dolor de perder tu luz...Pero esa es mi respuesta, cada uno buscará en su interior cual es realmente su verdad.

Aceptemos la oscuridad de nuestra vida como nuestra propia
Magill Umbra